Más de 600 abulenses emigraron al extranjero en 2011

J.M. Ayala  / Los mensajes de Merkel no sólo «calan» entre los responsables de los distintos gobiernos europeos. Los propios ciudadanos parecen tener claro también que los «consejos» de la canciller alemana no pueden caer en saco roto. Después de que hace ya más de un año la líder germana animara a los licenciados de medio mundo —principalmente en las distintas ingenierías— a que acudieran a su país para conseguir un puesto de trabajo, muchos han sido los que se han animado a emprender este camino no sólo hacia el territoio teutón, sino también a otros destinos menos castigados por la sempiterna crisis que está siendo especialmente cruel con España. En el caso de los castellano y leonesas, generalmente reacios a los cambios, lo cierto es que las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística revelan un pequeño «boom» de nuevos emigrantes de la Comunidad hacia el extranjero.

El último dato que bajara el organismo dependiente del Gobierno asegura que 3.104 españoles residentes en la Comunidad hicieron las maletas a otras latitudes durante el pasado 2011. Aunque la cifra pueda no ser demasiado elevada, lo cierto es que supone prácticamente el triple que la registrada durante los doce meses anteriores y el doble de «emigraciones» de 2009.

Frente al espectacular aumento de castellano y leoneses en el exterior, llama la atención que la cifra global de ciudadanos que abandonan la Comunidad más allá de las fronteras hispanas se haya reducido en los últimos tres años. Y es que los extranjeros se «mueven» menos que antes. Bien sea porque la llegada de foráneos a la Comunidad se ha reducido tras su masiva aparición a mediados de la pasada década o bien porque los que se encuentran en la Comunidad están asentados, lo cierto es que sólo 8.000 de ellos decidieron emprender una nueva aventura vital y laboral desde la Comunidad a otros países cuando sólo hace dos años la cifra había superado los 14.100

El estudio estimativo del INE también confirma con datos otro de los efectos del dramática situación económica del país y es que la llegada de ciudadanos a la Comunidad también ha caído de forma considerable en los tres últimos ejercicios. Después de que en algunos años se rozara la llegada de 20.000 extranjeros a Castilla y León, la tendencia cambió ya en 2009, cuando apenas arribaron 15.240, de los que algo más de mil eran españoles que regresaban a su país. Aunque el regreso de «nacionales» incluso aumentó en 2011 (1.539), lo cierto es que el número global de inmigrantes se redujo hasta los 13.393.

Más mujeres

Como consecuencia de estos datos, el saldo migratorio se «igualó» algo más al pasar de los 2.874 en favor de los inmigrantes a los 2.214 en 2011. El cambio es mucho más evidente si sólo se analiza únicamente el flujo entre españoles que se multiplicó en un año por más de 50 en favor de los que abandonan la Comunidad hacia el exterior. Así, si en 2010 era de -27 en el último año alcanzó el -1565 (diferencia entre los que se marchan y los que regresan).

Como curiosidad, las mujeres castellano y leonesas han dado la vuelta a la estadística y ahora son ellas las que se marchan de la Comunidad en mayor medida que los hombres.

Fuente: ABC