El estudio, pionero en su campo, está liderado por el decano de la Facultad de Ciencias de la Ucav, Pedro Mas, y el doctorando David Muñoz y servirá para comparar el ahorro medioambiental que supone depositar un turismo al final de su vida útil en un vertedero o trasladarlo a un centro autorizado de tratamiento. Según indicó Mas, si a los más de 700.000 vehículos, turismos y todoterrenos, que se dieron de baja en España en 2010 se les pudiera aplicar el modelo de reciclaje de Cesvimap, se ahorraría la fabricación equivalente de más de 400.000 toneladas de materiales diversos, sobre todo distintos tipos de aceros. Por Cesvimap pasan una media de 3.000 vehículos al año.
La idea de la investigación partió de Cesvimap que encontró en el equipo de la Ucav los recursos humanos necesarios para llevarla a cabo y en la Fundación Mapfre los económicos, según indicó su gerente, Ignacio Juárez. Para ello, aportarán al proyecto los datos disponibles desde 1997 sobre su actividad de reciclado. Su objetivo es confirmar la hipótesis de que los vehículos bien tratados “son un negocio, aportan muchos beneficios medioambientales y generan unos ahorros importantes a un país tan dependiente del exterior como el nuestro”.
Además de buscar el ahorro de materias primas, se pretende medir en toneladas de carbono equivalente, las emisiones, consumos energéticos y contaminación de gases efecto invernadero de la actividad; lo que se denomina ‘huella de carbono’. Un tema, explica Pedro Mas, actual, novedoso y sobre el que no se ha llevado una investigación completa ya que la atención suele centrarse en las emisiones de los vehículos que circulan.
De cara a las futuras aplicaciones de los resultados, Mas apuntó a la importancia del sector del automóvil en España. Su idea es ver qué materiales y en qué cantidades se están aprovechando y cuáles son los consumos energéticos de esta actividad. “Sabemos que es rentable, pero queremos poner sobre la mesa su rentabilidad no tanto en términos económicos sino en términos de eficiencia energética”, puntualizó; así como poner a disposición de la sociedad y los profesionales el conocimiento de este sector.
El acuerdo de colaboración con Mapfre tiene una duración de un año y una aportación económica de 15.000 euros. El proyecto lo desarrolla el grupo de investigación ‘Tecnología y cambio climático’ de la facultad de ciencias de la UCAV y está articulado en torno a proyectos de fin de carrera, doctorados y de final de máster.
Fuente: León Noticias
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