La cuota abulense

El arenense José Manuel Fernández Santiago podría ser reelegido como presidente de las Cortes de Castilla y León

Nos referíamos la semana pasada semana a la Consejería de Sanidad como elemento clave del próximo gobierno Herrera, cuya formación ha de conjugar tres condicionantes previos: Las consabidas cuotas territoriales y de equilibrio entre sexos, así como la reducción del número de Consejerías (ocho, como máximo nueve).


Sin embargo, el nuevo panel del poder autonómico tras las elecciones del 22-M comienza a tomar forma el próximo martes, día en que se constituyen las Cortes de la IX Legislatura y se renueva la Mesa de la Cámara. Ahí se despejarán las primeras dudas. Y cinco días antes bulle todo un hervidero de rumores acerca de la representación del PP en la citada Mesa. Incluso no se descarta la posibilidad de que José Manuel Fernández Santiago resulte reelegido para un tercer mandato como presidente.

El relevo de Fernández Santiago se ha dado por hecho en la inmensa mayoría de las quinielas. Ello con toda lógica, a partir de su falta de química personal con Juan Vicente Herrera y su entorno mas influyente, circunstancia que ya le situó en la cuerda floja en 2007, cuando repitió en el cargo solo gracias a que María Jesús Ruíz declinó entonces el ofrecimiento de presidir las Cortes. A partír de ahí -y sin entrar en otras consideraciones- se ha venido dando por descontado su relevo, máxime cuando Fernández Santiago nunca había gozado de la máxima protección del poderoso núcleo duro del PP abulense.


Pero en política las cosas dan muchas vueltas e igual que hoy, después del pifostio del PP de Soria, María Jesús Ruíz está completamente descartada, se comenta que el PP de Ávila está apostando férreamente por la continuidad del actual presidente de las Cortes, quién, no se olvide, ha vuelto a encabezar la lista autonómica por la provincia en las pasadas elecciones municipales. En el caso de que ese apoyo provincial sea tal, quedaría por ver si Herrera complace a los dirigentes del PP abulense o ignora su posición, como ellos hicieron, por ejemplo, con las directrices de la Junta sobre las fusiones de las cajas de ahorro.


A expensas de lo que suceda con Fernández Santiago (quién, según se aprecia en la foto anexa, fue sorprendido hace unos días circulando por el campamento de “indignados” de la Puerta del Sol), el vallisoletano Ramiro Ruíz Medrano sigue siendo el máximo candidato a sustituirle al frente del mausoleo. Reúne el perfil institucional adecuado y, lo que es más importante, los apoyos necesarios para ello, además de otra circunstancia: Ningún vallisoletano ha sido nunca presidente de las Cortes y sin embargo lo que sobran son vallisoletanos en el Consejo de Gobierno de la Junta (actualmente cinco).


En todo caso Ruíz Medrano parece tener plaza segura en la nueva Mesa de las Cortes, lo mismo que la todavía consejera de Administración Autonómica, Isabel Alonso, quién, tras encabezar la candidatura autonómica por Zamora, está destinada a sustituir en el órgano de gobierno de las Cortes a su paisana Carmen Luis Heras.

Otra duda que se despejará el martes es si habrá continuidad o relevo en la portavocía del grupo popular, cargo que computa al mismo nivel que el de consejero de la Junta a efectos de la cuota territorial.