sábado, 2 de abril de 2011

Una empresa de Las Navas del Marqués, deudora por la construcción de un cuartel en El Provencio (Cuenca)

Los empresarios afectados por los impagos de la empresa Díaz-Segovia, adjudicataria de las obras del nuevo cuartel de El Provencio (foto izquierda), volvieron ayer a concentrarse a las puertas de este edificio reclamando el pago de su deuda, y seguirán haciéndolo hasta que se les de una respuesta satisfactoria que, en principio, pasa por que el Ministerio del Interior se haga cargo de parte de la deuda contraída por la constructora con sede en la localidad abulense de Las Navas del Marqués.


Para ello, solicitan que se destine a los afectados tanto el aval de la empresa como el pago de la última certificación de obra que aseguran aún está pendiente de entregar a la empresa. Así lo ponía de manifiesto Diego Gutiérrez, uno de los representantes de las empresas damnificadas que ayer se concentraba ante el cuartel de El Provencio.


Según Gutiérrez, con la última certificación y el aval se podrían repartir 98.000 euros entre la docena de empresas afectadas, a quienes la constructora adeuda 250.000 euros, la mayoría de El Provencio y Villarrobledo (Albacete) aunque también se encuentran otras de San Clemente, Tomelloso (Ciudad Real) o Talavera de la Reina, en la provincia de Toledo. Curiosamente señalan que todas las empresas de Ávila que han participado en la obra de El Provencio, han cobrado; pero en el caso de las castellano--manchegas se han encontrado con un pre-concurso de acreedores, situación ante la que la empresa les oferta la renuncia del 40% de su deuda y el cobro de la restante en letras a 12 ó 18 meses, condiciones cuyo riesgo aseguran no están dispuestos ni pueden asumir.


El Provencio no es el único lugar donde los afectados han llevado y llevarán sus protestas, también lo han hecho en Las Navas del Marqués y seguirán insistiendo, porque “si nos quedamos callados es cuando no cobraremos”.


Boicot a la inauguración


De momento, el objetivo es impedir que se inaugure oficialmente el cuartel de El Provencio, impidiendo así que se haga efectivo el pago de la última certificación de obra. Pero, también, con esta protesta quieren sentar las bases para que en un futuro la administración exija a las adjudicatarias avales de pago que no puedan dejar en la calle a las subcontratas.

Fuente: El Día

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