El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó este jueves destinar una inversión de 2.769.993 euros para la contratación de cuadrillas de especialistas en la lucha contra incendios forestales en nueve bases helitransportadas de las provincias de Ávila, Burgos, León, Salamanca y Zamora. Su principal tarea es la extinción de incendios forestales en su zona y participar como brigada de refuerzo en ataques ampliados, además de realizar actuaciones de prevención de incendios.
Por provincias, la inversión aprobada se eleva a 216.972 euros en la base de Cebreros (Ávila); 180.740 euros en Medina de Pomar (Burgos); 1.006.037 euros en las bases aéreas de Cueto, Rabanal del Camino y Camposagrado (León); 595.778 euros en las bases helitransportadas de El Maíllo y El Bodón (Salamanca), y 770.464 euros en las bases helitransportadas de Rosinos y Villardeciervos (Zamora).
Estas cuadrillas tienen como principales cometidos la extinción de incendios forestales, quemas controladas, desbroces manuales, mantenimiento de infraestructuras de incendios, trabajos diarios de extinción y silvícolas de entrenamiento, formación continuada en extinción, seguridad y primeros auxilios, así como trabajos de mantenimiento, arreglos, orden y limpieza de la base.
Esta actuación se enmarca en la política de la Consejería de Medio Ambiente de mantener la inversión y el empleo en las zonas rurales cuidando del medio ambiente. La lucha contra los incendios forestales, además de reducir los riesgos de destrucción de los recursos naturales, es generadora de gran cantidad de puestos de trabajo, fija población en el medio rural y ejerce de motor de la actividad económica.
La inversión aprobada permitirá realizar actuaciones con anticipación a la época de alto riesgo de incendios, contratando los medios necesarios y corrigiendo los desequilibrios económicos y demográficos entre las áreas rurales y urbanas de la Comunidad.
Prevenir para no lamentar
La prevención constituye la prioridad de la política de la Consejería de Medio Ambiente ante los incendios forestales. En este sentido, en 2011 se trabaja en tres líneas de actuación: la realización de tratamientos silvícolas preventivos, programas de desbroce y desarrollo del aprovechamiento de la biomasa forestal.
Anualmente cerca de 4.700 personas trabajan en el Operativo de Extinción de Incendios Forestales de la Comunidad. Durante el año pasado, en Castilla y León se registraron 1.199 incendios que afectaron a 8.864 hectáreas, de las cuales 1.524 fueron de superficie arbolada y el resto de matorral, monte bajo y pastos.
Fuente: Ical
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