Los permisos de trabajo a extranjeros caen en Ávila un 72,6% desde el inicio de la crisis

Los trabajadores en el extranjero no son ajenos a la crisis por la que atraviesa España y los estragos que ha causado en su mercado laboral en general y en las autonomías, en particular, algo de lo que no se ha librado Castilla y León. Prueba de ello son las cifras de autorizaciones de trabajo a foráneos concedidas durante los años de crisis. Y es que entre 2008, cuando se inició la recesión, y 2010, los permisos a extranjeros para trabajar en centros de Castilla y León se desplomaron un 73,2 por ciento, hasta los 7.251 en el último año, 19.840 menos que en 2008.


La Comunidad tuvo un comportamiento similar al de España, donde las autorizaciones de trabajo a extranjeros se redujeron un 73,7 por ciento, hasta los 207.900, es decir, 582.956 menos que los concedidos en 2008, según los datos que maneja el Ministerio de Trabajo e Inmigración.


La cifra de autorizaciones descendió en 2008 un 4,2 por ciento en la Comunidad, desde las 28.290 de 2007. Sin embargo, en 2009, la cifra cayó un 54 por ciento, hasta los 12.457 permisos, y de 2009 a 2010, un 41,8 por ciento. Por provincias, el mayor número de autorizaciones se registró el año pasado en Valladolid, 1.402; León, 1.130; Burgos, 1.122, y Salamanca, 1.092, con descensos del 71,8, 66,6, 71,5 y 56,4 por ciento, respectivamente, en relación al año de inicio de la crisis, es decir, 2008. Asimismo, en Segovia se contabilizaron 757, un 87,7 por ciento menos que en 2008, en Ávila, 558, con un descenso del 72,6 por ciento, y en Soria, 535, que suponen una disminución del 64,7 por ciento. Por último, se concedieron 341 permisos a extranjeros para trabajar en centros de Palencia, y 314 para la provincia de Zamora, con retrocesos del 71 y el 77,4 por ciento, respectivamente.


Por otra parte, un informe de CC.OO. pone de manifiesto que en el último año en la población con nacionalidad española y extranjera el desempleo avanzó a ritmos similares en Castilla y León, mientras que en España el aumento del desempleo de la población autóctona fue mucho mayor que para la foránea. Así en Castilla y León, el desempleo de personas extranjeras creció a un ritmo ligeramente superior al de las personas con nacionalidad española, 16,4 por ciento frente al 14,8 por ciento. Por el contrario, en España la tasa de variación del desempleo de la población autóctona fue superior a la extranjera, 13,7 por ciento frente al 5,5 por ciento.


«De esta evolución se deduce que tanto para las personas con nacionalidad española como extranjera el desempleo ha aumentado en nuestra región a ritmos superiores a los de la Nación, especialmente para el colectivo extranjero (tres veces mayor)», destacaron fuentes de CCOO.


En términos absolutos en Castilla y León, de los 24.400 nuevos desempleados, 19.800 eran autóctonos y 4.700 extranjeros. En España de los 482.800 nuevos parados, 425.100 eran nacionales y 57.800 foráneos. Por tanto de los 187.000 desempleados castellanos y leoneses, 153.900 eran de nacionalidad española (82 por ciento del total) y 33.200 extranjera (18 por ciento). En España, la proporción de extranjeros fue mayor al término de 2010 que en la región y suponían el 24 por ciento sobre el total de desempleados frente al 76 por ciento que representan los nacionales.


El desempleo aumentó en Castilla y León tanto para nacionales como para extranjeros, a mayores tasas en hombres que en mujeres (en España para los extranjeros aumenta más en mujeres). CCOO indica que tanto en hombres como en mujeres, el paro en el colectivo extranjero aumentó a mayor ritmo que en el nacional (en España para los hombres se incrementa más en los autóctonos).


Fuente: ABC