La provincia de Ávila ha sufrido hoy ocho incendios forestales, de los cuales cinco han sido extinguidos, dos controlados y uno permanece activo, según han informado fuentes de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León.
El más importante de todos ellos, el declarado en torno a las 10.00 de la mañana entre los municipios de Serranillos, Pedro Bernardo y San Estaban del Valle -el más afectado-, ha quedado extinguido a las 19.30 horas tras haber arrasado en torno a 130 hectáreas de piornos o retamas, según el guarda jefe de la comarca de las Cinco Villas, José María Fraile.
En las labores de extinción, que han contado con medio centenar de efectivos, han participado cinco cuadrillas, nueve agentes medioambientales, tres camiones motobombas, un helicóptero y dos hidroaviones.
Este incendio, que como los demás son de nivel 0 y su origen se desconoce, comenzó en el paraje conocido como "Calamocho de San Esteban" y se fue extendiendo ladera arriba hasta alcanzar un frente de un kilómetro y medio.
Las llamas han avanzado por una zona de dehesa que según recordaba el alcalde de San Esteban del Valle, Jesús González, debería estar cubierta por la nieve a estas alturas de año.
Después de este incendio se han ido sumando otros siete más durante toda la jornada en diferentes zonas de la provincia abulense, destacando las inmediaciones de El Barco de Ávila, al suroeste de la capital, donde se han declarado hasta cinco fuegos.
De todos ellos, han sido controlados en torno a las 19.30 los iniciados esta mañana en el municipio de San Bartolomé de Béjar y por la tarde en Hustias, un anejo de Umbrías, donde también ha tenido lugar un incendio que ha sido extinguido tras carbonizar roble y pinar de repoblación.
Igualmente, ha sido extinguido el incendio de Santiago de Aravalle, un anejo de Puerto Castilla, mientras que en torno a las 19.30 se ha declarado otro fuego en el municipio de Becedas, próximo a San Bartolomé de Béjar.
A todos estos incendios hay que sumar los ya extinguidos y que han tenido lugar en los municipios de Navahondilla, muy próximo a la Comunidad de Madrid, y La Parra, un anejo de Arenas de San Pedro donde en julio de 2009 se desató el incendio que arrasó más de 4.000 hectáreas.
En las labores de extinción de Navahondilla, donde han ardido pastos y robles, han participado un agente medioambiental, un helicóptero de Madrid y ocho autobombas -siete de Madrid-.
En el de La Parra, que comenzó a las 15.10 y quedó extinguido a las 17.00 horas, participaron un agente medioambiental y una autobomba.
Fuente: El Economista
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