«Estoy aquí porque he subido la escalera peldaño a peldaño, casi sin darme cuenta», decía Álvarez al iniciar el acto, celebrado ayer en la finca El Quexigal, dentro del término municipal de Cebreros (Ávila). «Sin darme cuenta llegué al primer piso y seguí –continuó–. No sé en que piso estoy ahora. Dicen que es muy alto, pero a mí me parece que no». Lo que sí tiene claro es que ha trabajado «mucho» y que los inicios «fueron muy duros».
Definió la situación económica actual como «problemática» pero recordó que él tuvo que hacer frente a la posguerra y a la II Guerra Mundial. «Pasamos hambre y trabajamos mucho –rememoró–. Mi padre ganaba 10 pesetas al día y éramos cinco hijos. Lo de ahora… casi es un placer», añadió con una media sonrisa.
«Empezó de unos orígenes muy modestos, pero poco a poco fue subiendo y hoy en día, a pesar de ser 'superman', sigue siendo un hombre modesto, sencillo, agradable, amigo de sus amigos, y muy generoso», afirmaba Santiago de Ybarra, consejero de El Norte y del Grupo Vocento, y amigo personal del homenajeado desde sus inicios, en Bilbao. También destacó la «atención y pasión» que dedica Álvarez «a todas las cosas en las que interviene».
Al acto, celebrado en el monasterio de la época de Felipe II que existe en la citada finca, asistieron un gran número de personalidades, entre las que destacó Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, que acudió acompañado de su mujer.
También estuvo el vicepresidente primero del Senado y ex presidente de la Junta de Castilla y León, Juan José Lucas así como el palentino César Antón Beltrán, director general del Imserso. Allí se vio ademas al procurador José Manuel Fernández Santiago, ex presidente de las Cortes regionales, y el ex alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, sin olvidar al regidor local, Ángel Luis Alonso.
Periodistas y empresarios
No todos fueron políticos. Entre los asistentes se encontraba Óscar Campillo, director del periódico Marca; el sacerdote Jesús García Recio, director del Instituto Bíblico y Oriental de León; y el empresario Rafael Benavente, responsable del Grupo Keraben. Además, gran parte de los invitados fueron los propios directivos del Grupo Eulen, encabezados por su vicepresidenta, María José Álvarez.
La velada comenzó con la actuación del Orfeón Donostiarra. Tras el concierto de esta centenaria institución coral, los comensales pudieron disfrutar de una elaborada cena que concluyó con las intervenciones de Santiago de Ybarra y del propio David Álvarez.
El Grupo Eulen está especializado en los servicios de limpieza, seguridad privada, servicios auxiliares (logísticos, generales y telemarketing), FSM, servicios sociosanitarios, mantenimiento, trabajo temporal y medio ambiente.
Fuente: El Norte de Castilla
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